La Biblioteca Recomienda | BOL Bilbao |Jacques Alain Miller. El hombre de los lobos

EL HOMBRE DE LOS LOBOS

Un Seminario de investigación psicoanalítica

                El texto recoge las trece sesiones que J.A. Miller dedicó al Hombre de los Lobos en su Seminario sobre la clínica diferencial de las psicosis de 1987-88, es decir, diez años antes de que propusiera, en la convención de Antibes, el sintagma `psicosis ordinaria´ que ha revolucionado nuestra práctica clínica. Texto que no dudo en calificar de decisivo 1/ porque el Hombre de los Lobos es el primer caso profusamente documentado de lo que hoy podemos llamar psicosis ordinaria, caso que permitió a Miller esclarecer en este Seminario las cuestiones estructurales fundamentales que han venido a posteriori a exigir la construcción de este concepto epistémico. 2/ porque estamos ante algo más que un enorme esfuerzo intelectual de esclarecimiento. Sabemos lo difícil que resulta comprender cabalmente los conceptos psicoanalíticos si no se encarnan en algo vivo. Y Miller nos lleva de la mano, paso a paso, con su habitual ejercicio de precisión y claridad, hasta conseguir que tengamos la sensación de casi tocar con las puntas de los dedos lo que es “la cosa” en sí.

                ¿Hay o no hay castración en el Hombre de los Lobos?, esa es la cuestión fundamental que atraviesa el Seminario. Recordemos el diagnóstico de Freud: “al final subsistieron en él, lado a lado, dos corrientes opuestas, una de las cuales abominaba de la castración mientras que la otra estaba pronta a aceptarla y a consolarse con la feminidad como sustituto. La tercera corriente, más antigua y profunda, que simplemente había desestimado la castración ateniéndose al punto de vista del comercio por el ano, seguía siendo activable”.   Miller lo resume así: “existe una actitud ambivalente respecto a la castración y, por debajo, una actitud de verwerfung fundamental. Lo que quiere decir que el propio reconocimiento está dividido: abominar de la castración o aceptarla, lo que hace que el erotismo anal se encuentre en dos lugares. Hay por tanto tres corrientes: abominar de la castración o aceptarla, pero con la tercera corriente (verwerfung fundamental) siempre reactivable” (pgna 36).

                Ateniéndonos a la fórmula canónica de la metáfora paterna, tenemos una relación de causalidad completamente lineal: Nombre del Padre=significación fálica (P = Fi). Por el contrario, como lo ilustra el caso Schreber, tenemos que la forclusión implica la ausencia de significación fálica (P subcero = Fi subcero).   Pero en el caso de Hombre de los Lobos “la coyuntura de desencadenamiento se produce más bien por el lado de la significación fálica que por el lado del padre” (pgna 45). De hecho, para Lacan, el Hombre de los Lobos es una mujer en el inconsciente, mientras que en el plano imaginario tiene una virilidad de puro semblante. Así, en el Seminario I afirma: “…para él siempre fue como si el plano genital literalmente no existiese” (pgna 96), e inmediatamente después: “Veamos al Hombre de los Lobos, no hubo para él Bejahung, realización genital” (pgna 97). Es decir, estamos en Fi subcero, mientras que, según Miller, “por el contrario, esta relación con el padre parece totalmente constituida en el caso del Hombre de los Lobos” (pgna 51). Por lo tanto, “uno de los interrogantes que nos plantea este caso, dice Miller, es si se puede desvincular la relación de causalidad entre el padre y el falo, entre el padre y el advenimiento de la significación fálica” (pgna 51). Es decir, el problema se encuentra (estamos en 1988) en saber si puede darse P y Fi subcero así como Psubcero y Fi. “Una clínica diferencial no consiste simplemente en etiquetar los casos como se etiquetan mariposas. Una clínica diferencial sólo tiene interés si se articula con una causalidad diferencial que la sostiene. Estamos dando vueltas a la idea de una causalidad diferencial de las psicosis”(pgna 46).

                Un descubrimiento de texto!

Luís Fermín Orueta